La gestión de calidad aplicada a ventiladores mineros integra control de procesos, verificación de materiales, calibración de equipos y trazabilidad desde el diseño hasta la puesta en marcha. Asegura que las curvas certificadas, los protocolos de prueba y la documentación técnica reflejen el desempeño real del equipo, preservando seguridad, fiabilidad y eficiencia.
El enfoque incorpora auditorías internas, indicadores de mejora continua, control dimensional del impulsor, balanceo dinámico y verificación de recubrimientos anticorrosión. La integración con variadores VFD y la validación aerodinámica soportada por CFD garantizan operación en curva estable, bajo ruido y menores pérdidas.
Una gestión de calidad robusta facilita el mantenimiento predictivo mediante límites de alerta en presión/caudal, vibración y temperatura, además de reducir tiempos de inactividad. Con manuales, planos, certificados y registros de inspección, se consolida la confiabilidad del sistema de ventilación minera a lo largo del ciclo de vida.