El ventilador resistente al calor está destinado a zonas de alta temperatura en minería: proximidad a hornos, estaciones de secado, talleres o recintos con gases calientes. Emplea aceros aleados, impulsores balanceados para dilatación, aislamiento térmico en carcasa y acoplamientos adecuados para limitar la transferencia de calor al motor y rodamientos. Su objetivo es mantener el punto de operación sin deformaciones ni pérdidas por holguras excesivas.
Con CFD se diseñan toberas, difusores y ventilación de carcasa para controlar capas térmicas, reducir ruido y evitar zonas de recirculación. La integración con VFD posibilita arranques suaves y ajuste por presión/caudal compensando variaciones de temperatura y densidad del aire, con menor esfuerzo mecánico. Se recomiendan sellos y lubricantes aptos para alta temperatura, así como sensores redundantes de vibración y temperatura para mantenimiento predictivo.
La correcta selección de materiales, recubrimientos anticorrosión ante condensados y un diseño de ductos con transiciones suaves garantizan estabilidad y eficiencia. Con curvas certificadas, manuales y protocolos de prueba, el ventilador resistente al calor asegura fiabilidad, seguridad y desempeño sostenido en ambientes térmicamente exigentes.